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Hace un año el gobierno de Egipto presentó un nuevo ministro de Turismo, un ministro que ha estado en su cargo desde entonces y hasta ahora, momento en el que ha decidido dejar su cargo. Se trata de una dimisión inesperada debido a que no hay problema alguno en materia de turismo que haga que el ministro tenga que dimitir, pero sin embargo es la decisión que ha tomado.

Parece ser que se debe al nombramiento de un salafista como gobernador de Luxor, algo que no le ha parecido bien al ministro y como coherencia con sus pensamientos deja su cargo. Lógicamente el presidente de Egipto no ha tenido otra cosa más que aceptar la dimisión y a partir de ahora tendrá que nombrar a un nuevo ministro de turismo que le pueda suplir en la complicada tarea de poder tener unas mejores perspectivas de futuro.

Desde el punto de vista económico el sector turístico es uno de los más importantes y por ello elegir bien al nuevo ministro será la misión del presidente del país. Los salafistas son los que están en contra de la venta de alcohol para los turistas y por supuesto no están a favor del uso del bikini por parte de las mujeres extranjeras. Por todo ello el ministro de turismo ha tenido que dejar su cargo ante la situación que se estaba creando desde hacía algunas semanas y mucho más con el último nombramiento del gobernador de Luxor.

Vía | Hosteltur
Foto | Wikimedia

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